Por: Marco Velázquez Cristo.
En los últimos días hemos asistido a un comportamiento camaleónico de NYT y CNN que, para algunos resulta llamativo e inexplicable y para otros, gestos positivos y sugerentes de una rectificación de errores cometidos en el desempeño de su labor de informar.
Una pregunta: ¿Cambiaron de dueños o dejaron de pertenecer estos al Establishment norteamericano?
La respuesta obviamente negativa indica que siguen respondiendo a los mismos intereses de siempre, es decir, a los de las elites de poder estadounidenses, por lo tanto no se puede esperar que sus vaivenes informativos, respondan a buenas intenciones.
Partiendo de lo anterior analicemos la publicación por NYT de un vídeo en el que se dan elementos que demuestran que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) no fue la responsable de los incendios de los camiones con «ayuda humanitaria».
Antes de continuar hay que dejar sentado que, en medios como Telesur, Rusia Today e HispanTV entre otros, así como en las redes sociales ya se habían publicado imágenes y videos con amplios detalles que demuestran con mayor claridad y objetividad lo que pasó con dichos vehículos.
Con el video y la descripción que lo acompaña, NYT trata de demostrar que un trapo que se desprendió accidentalmente de un cóctel mólotov lanzado por un opositor contra las FANB fue el causante del hecho.
De esa manera desmienten solapadamente la versión del gobierno bolivariano de que los camiones estaban destinados a ser quemados para inculparlo a la vez que, desestiman la intencionalidad liberando de responsabilidad a los violentos que, pagados por la derecha venezolana los incendiaron conscientemente. Lo sabe el Times.
Adicionalmente resulta poco creíble que, un trapo aún cuando haya estado impregnado de gasolina pueda haber desatado en tan corto tiempo un incendio de la magnitud, capacidad de propagación y destrucción del que se pudo apreciar.
El Times tiene varios «pecados» en el tratamiento informativo que le ha dado a la actual agresión que desarrolla su país contra Venezuela. Así ha asegurado que la «ayuda humanitaria» había entrado a esa nación por la frontera con Brasil y que la «crisis humanitaria» (que han inventado su gobierno, medios como él y la derecha venezolana) es responsabilidad de Nicolás Maduro, entre otras «mentirillas» de ocasión. Luego veremos que hay detrás de todo esto.
En cuanto a CNN con su video sobre los preparativos en Colombia para perpetrar el fallido atentado con drones contra el presidente Nicolás Maduro, solo viene a confirmar lo que ya han denunciado las autoridades bolivarianas que, han expuesto detalladamente todo lo relacionado con este hecho y su génesis en Colombia.
Hay que reconocer que CNN es tan burda en su forma de mentir que, para lavarle la cara hace falta hasta cambiarle el nombre.
Entonces, ¿por qué esas dos publicaciones en estos momentos?
El NYT es el periódico más influyente de Estados Unidos con una amplia gama de lectores dentro y fuera de este, entre los que goza de credibilidad, el comprometer está como lo han hecho, presionados por la forma en que han evolucionado los acontecimientos no resulta beneficioso para los planes imperiales.
Necesitan desintoxicarlo y reforzar su imagen de imparcialidad para posicionar con credibilidad mentiras como la publicada el 17 de este mes por ese medio y replicada por otros sobre la supuesta utilización por el gobierno bolivariano de los médicos cubanos para presionar a los votantes.
La noticia construida a partir de los testimonios de evidente falta de veracidad de galenos de la isla que, abandonaron la misión médica en Venezuela, tiene el doble propósito de deslegitimar la ayuda solidaria de Cuba a esa hermana nación y hacer lo mismo con las elecciones presidenciales del 2018 en que resultó electo Nicolás Maduro para ese cargo. Ambas cosas objetivos estratégicos de Washington en su intento por apoderarse del petróleo venezolano y por lo tanto más importantes que los camiones quemados.
En el caso de CNN a pesar de su baja y cuestionada credibilidad necesitan de su alcance y docilidad para divulgar sus mentiras y por eso, darle un poco de maquillaje a su meretriz mediática es algo que no desprecian.
No se puede obviar que, en este escenario la demora en poder derrocar al gobierno legítimo de Nicolás Maduro, empuja al imperio a desarrollar nuevas estrategias mediáticas que le permitan mantener las matrices de opinión contrarias al chavismo que han logrado instaurar; por eso sacrifican cuestiones tácticas o que han perdido relevancia en el escenario en que se desenvuelven los acontecimientos actualmente, para tratar de alcanzar objetivos de mayor alcance como ya explicamos.
En la medida en que el olor a fracaso les llegue con mayor fuerza a sus narices más pérfidas se tornaran sus acciones.
Un comentario sobre “¿Qué se esconde tras las «veleidades» mediáticas de The New York Times y la CNN?”