Por: Ileana González.
Bajo la lápida de este título yace el cadáver político de Harold Cárdenas Lema, no por culpa de extremistas sino de su desmedido ego, su falta de convicciones revolucionarias y el cambio de mapa mental de su cerebro, viaja al inframundo de sus sueños en alas de la egolatría, vestido con traje de hipocresía y su maletín de ambiciones, presa de un delirum tremens en que se compara con Martí y le echa la culpa a Trump de su definitivo deceso. Pobre Harold. E.P.D.
Hola Ileana, chica hasta donde yo sé, HCL no es una figura pública, vamos, no es ni ha sido dirigente político ni administrativo en Cuba; no es representante de ninguna Organización de Masas, ni miembro fundador de ninguna ONG cubana o extranjera; hasta donde yo se, HCL es un joven cubano bien preparado, cultural y académicamente, tiene muchas inquietudes en el campo de las ideas y expresa, la mayoría de ellas, de una manera directa y sin miedo. Ha decidido cursar una Maestría en los Estados Unidos, lo que no me parece sea un crimen, al contrario, creo que es un paso valiente ir a vivir fuera de tu país y estar dispuesto a estudiar bajo el rigor de otra cultura y otra disciplina. Es decir Ileana, no se por qué escribes un «epitafio» de una persona que lejos de morir «políticamente» está intentando superarse para ser cualitativamente mejor, con una amplitud de conocimientos más extensa y con la experiencia de aprender a pensar, para poder entender, al resto de las personas que piensan diferente. Yo soy incapaz de juzgar a los demás, porque realmente defiendo el principio de que cada quién es libre de decidir que hace con sus minutos, horas y días; a ti no te conozco, pero al leer el «epitafio» que has dedicado a HCL, lo primero que pensé es que sentías celos de él, ya sabes, ese «celito con roña», que a veces lo apodamos con uno de sus tantos sinónimos. Ojalá que yo esté equivocado y que tus motivos para el «epitafio de HCL» tengan argumentos respetables. Saludos
muchisimos, pero muchisimos, solo que para que hacer leña del arbol caido, si el los pide no usted les daremos muchisimos , pero muchisimos
Si no quieres hacer «leña de árbol caído» para qué escribiste el epitafio???
Porque la hipocresía no es ética
Hola Ileana, chica hasta donde yo sé, HCL no es una figura pública, vamos, no es ni ha sido dirigente político ni administrativo en Cuba; no es representante de ninguna Organización de Masas, ni miembro fundador de ninguna ONG cubana o extranjera; hasta donde yo se, HCL es un joven cubano bien preparado, cultural y académicamente, tiene muchas inquietudes en el campo de las ideas y expresa, la mayoría de ellas, de una manera directa y sin miedo. Ha decidido cursar una Maestría en los Estados Unidos, lo que no me parece sea un crimen, al contrario, creo que es un paso valiente ir a vivir fuera de tu país y estar dispuesto a estudiar bajo el rigor de otra cultura y otra disciplina. Es decir Ileana, no se por qué escribes un «epitafio» de una persona que lejos de morir «políticamente» está intentando superarse para ser cualitativamente mejor, con una amplitud de conocimientos más extensa y con la experiencia de aprender a pensar, para poder entender, al resto de las personas que piensan diferente. Yo soy incapaz de juzgar a los demás, porque realmente defiendo el principio de que cada quién es libre de decidir que hace con sus minutos, horas y días; a ti no te conozco, pero al leer el «epitafio» que has dedicado a HCL, lo primero que pensé es que sentías celos de él, ya sabes, ese «celito con roña», que a veces lo apodamos con uno de sus tantos sinónimos. Ojalá que yo esté equivocado y que tus motivos para el «epitafio de HCL» tengan argumentos respetables. Saludos
muchisimos, pero muchisimos, solo que para que hacer leña del arbol caido, si el los pide no usted les daremos muchisimos , pero muchisimos
Si no quieres hacer «leña de árbol caído» para qué escribiste el epitafio???
Porque la hipocresía no es ética
Bueno, no hay dudas de que en el campo revolucionario ya KCL no tiene posibilidades. Al menos coincidiremos en que su jugada final si no es abandono es bastante original. Seguir defendiendo al gobierno cubano en Nueva York; no jorobe!
Siempre he pensado que Harold es un tipo habilidoso y buen jugador. La pone donde quiere y tiene buena velocidad.
Un día le dije que si tiene la juventud, la inteligencia, la popularidad y el remedio blando, por qué no aspira a tomar la batuta? Ah, no; él solamente critica porque, dizque no aspira a compartir el poder: yo sé que no lo quieren sus conmilitones.
Había un usuario en LJC nombrado Elpidio Valdés que, aunque un tilín extremista, le cantaba las verdades al muchacho malcriado y entre esas verdades estaba esta: se va pa la Yuma a defender la revolución. ¡Qué gandinga!
A esperar la perestroika sentado cómodamente en la glásnost…
Claro que si, mucha perestroika y glasnot, ah verdad que ustedes lo que quieren es todo lo contrario, se me olvidaba, jajaja, por eso, como el viejo teodoro, con la zanahoria y el garrote, ya entenderan.
Bueno, no hay dudas de que en el campo revolucionario ya KCL no tiene posibilidades. Al menos coincidiremos en que su jugada final si no es abandono es bastante original. Seguir defendiendo al gobierno cubano en Nueva York; no jorobe!
Siempre he pensado que Harold es un tipo habilidoso y buen jugador. La pone donde quiere y tiene buena velocidad.
Un día le dije que si tiene la juventud, la inteligencia, la popularidad y el remedio blando, por qué no aspira a tomar la batuta? Ah, no; él solamente critica porque, dizque no aspira a compartir el poder: yo sé que no lo quieren sus conmilitones.
Había un usuario en LJC nombrado Elpidio Valdés que, aunque un tilín extremista, le cantaba las verdades al muchacho malcriado y entre esas verdades estaba esta: se va pa la Yuma a defender la revolución. ¡Qué gandinga!
A esperar la perestroika sentado cómodamente en la glásnost…
Claro que si, mucha perestroika y glasnot, ah verdad que ustedes lo que quieren es todo lo contrario, se me olvidaba, jajaja, por eso, como el viejo teodoro, con la zanahoria y el garrote, ya entenderan.